Ashram


En el Ashram los días pasaron lentos. Fue un trabajo tanto físico como psicológico. La idea que yo tenía de ashram, difería mucho de lo que iba a vivir. Supongo que eso ocurre cuando creas un concepto en tu mente de algo que todavía no conoces...

12/22 Febrero 2009. Shivananda Ashram. Neyaar Dam. Kerala.

Coger el tren desde Varkala dirección Trivandrum, desde mi soledad, dirección, cumpliendo otro sueño,...me gustaba...
Necesitaba sentirme viva llenando mi corazón de aire, mis ojos de frescura y mi alma de seguridad. Pasear por calles extrañas afianzando los pasos que iba viendo. Jugando con los trucos que ya conocía. Sentirme extraña en mi propio paraíso... caminar en mi y conmigo. Parece que las cosas se ven de otro modo...

El trayecto era largo. Al llegar a Trivandrum, tenía que coger dos autobuses más y luego caminar otro rato con las mochilas y un calor sofocante cuesta arriba...se me quedó ese deje de ahorrar y sufrir al mismo tiempo por no coger un ricksaw. Llegar y ver que allí se movía dinero. Tramites necesarios para entrar, y sonreir. La cama sería lo primero importante que iba a elegir. Del número 13 al 33 y por último me decido por la cama 12 del piso de abajo. Es más fresquito y da a la parte de fuera.



El horario:
Nos levantamos a las 5.30 a.m. con el sonido de la campanita ( que gracia al principio, más tarde tendría pesadillas y manías persecutorias cada vez escuchaba el sonido de una campana, muy habitual en la vida cotidiana de los indios)

Aseo y a las 6.00, comenzaba la meditación en una gran sala revestida con grandes cuadros de cada uno de los dioses hindúes principales; Siva, Kali, Parvati, Ganesh, Hanuman, Krisna,....rodeada de un montón de gente con uniforme; camiseta amarilla y pantalones blancos que recibían el curso para profesores de yoga.



15 o 20 minutos después, comienzan los cantos y los rezos, (que permanecieron grabados como fuego durante días dentro de mi cabeza)

Sobre las 7.30, el Swami ataviado de naranja, hablaba y hablaba y a mí se me caían los párpados. Los sentía pesados y soñaba con mi cama.



A las 8.00, la campana y un té en el jardín y las clases de Hata yoga hasta las 10.00. Siempre el mismo método; rezo, OM, saludo al sol, trabajo durísimo de piernas y abdominales y las 12 asanas o posturas estáticas y de tortura... Creo que fueron los días más flexibles de toda mi vida. Por momentos, me venían recuerdos de cuando era pequeña y hacíamos ejercicios de flexibilidad en el cole, los odiaba porque (me viene de familia) soy un tronquete.





A las 10.00, la campanita y la comida. Otra sala grande con el suelo de baldosas azules y dos filas de columnas a lo largo que separaban la sala en 3 partes. Largas esterillas repartidas en línea, y toda la gente cruzada de piernas comiendo con las manos y escuchando la frase típica :”OOMMM...silence please”.
La comida estaba buena aunque a los largo de los días se repetía una y otra vez, (como la frase y la campanita). Voluntarios hacían su Karma sirviendo las veces que quisieras.. captabas su atención con un “OOOMMMM” largo y alto, y te comunicabas con gestos y con la mirada. (esto al final se convirtió en un juego de niños y cuando el “profe” no te veía, hablabas y reías con los compis que tenías a ambos lados).
Comer con las manos me supuso volver a las raices más primarias. Precisamente volvías a disfrutar rompiendo reglas que en occidente son de compostura; chuparte los dedos, amasar el arroz con las salsas, coger la chapati y preparar pequeños bocaditos directos a tu boca...siempre con la mano derecha, porque la izquierda está vinculada a otros menesteres...

A las 11.30 la campana, toca el KARMA yoga, es decir, hacer un trabajo para “la comunidad”, para “sentirte más integrado”, limpiando retretes, recogiendo la mierda,...Aquí agudicé aun más si cabe el arte del escaqueo, ya que en el cole no pude expandirme, tuve que cerrar esta etapa de mi vida en el ashram. Se trataba de un juego de niños no?.Me las ingenié por aqui y por allá para que esa hora de curro desapareciera de mi horario. Esta fue parte de mi revancha y mi rebeldía...

A las 12.30...la tin tin tin, clase de Coaching, o clase opcional donde te resolvían con atención personalizada dudas y preguntas.

¡no hay respiro!

A las 14.00......rin y Lecturas, es decir, una señora con acento chicloso y espeso hablando sobre trascendencias y esas cositas... a estas solo fui un día, el resto,....

De 15.30 hasta las 18.00, ¡Otra vez yoga!!! Nunca había sudado tanto y tan seguido, y me olía el sobaco!!. Cuando comenzó la 2ª quincena, y por tanto un nuevo curso, decidí meterme a la clase de nivel intermedio..craso error, porque a medida que pasaban los días, la cosa se ponía durísima, aquello parecía la academia de Fama, con los chicles boomer delante tuya que servían de ejemplo, o, mal ejemplo, porque acababas con tirones y alargamientos corporales no deseados, que luego se convertían en agujetas hasta en las uñitas de los piececitos durante días inacabables...Eso sí, tenía por barriga una tableta de chocolate, brazos de Rocky y piernas de Arancha Sánchez Vicario...y un culito...bien prieto.

Por fin las 18.00, ¡que bien suena la campana!. La cena bien merecida.

A las 20.00 hasta las 22.30, de nuevo el Satsang...ya sabes, chanting, meditación, y charla, que algún día se amenizaba con espectáculos como Katakali, concierto, o excursión nocturna en silencio...



Y a las 22.30....a la cama..que día tan agotador!!

Si es que a alguien le interesa el arte del escaqueo, yo aprendí a subirme a la azotea por las mañanas y por las noches para perderme el Satsang, o escaparme del Karma yoga (días más tarde, la azotea tenía una gran afluencia de tráfico de despistadas). También escaparme algún día y dejar la almohada debajo de la sábana para hacer una visita a Aitor y desconectar en la playa de aquella especie de internado...

Conclusiones: muchas reglas y contradicciones, mucho ego y gente subida, poco tiempo para ti...aunque también es una buena experiencia para aprender a ser disciplinado con uno mismo, cuidar tu cuerpo y sentir cada ápice de él, y sobre todo, conocer a gente encantadora que siente y piensa como tú.

¿Que si lo recomiendo como experiencia?. Pues claro que sí...

TILIN TILIN TILIN...OM NAMA SIVAYA


6 comentarios:

Anónimo dijo...

estoy muy orgulloso de tener un prima tan trabajadora..adelante y duro con el yeso!!

te kiero

oli

Anónimo dijo...

Eres lo mejor!!!!!!
Ele

mariola dijo...

Me dejas alucinada... qué gran experiencia!!! Tengo tantas ganas de sentarme contigo y hablar... o sólo mirarnos y comunicarnos a través del puente ese del que hablaba Aitor en algún capítulo del viaje. Aprende mucho de Yoga que aquí vas a encontrar una alumna disciplinada.
:-) te quiero. Mariola.

Anónimo dijo...

Hola, estoy pensando en ir al mismo ashram en noviembre...me parece un poco duro lo que me cuentas, pero yo estoy mas interesado en hacerme un tratamiento ayurveda que en el yoga ¿ puedes darme algún consejo ? viajaria solo ¿ es muy duro ? ¿ que tal los alrededores para hacer algo de turismo ? mi correo : xixon7@yahoo.es muchas gracias por tu ayuda. Saludos.

aitor dijo...

Hola JM.

Lo que cuento, es mi experiencia por supuesto, y tampoco puedes considerarla fielmente, poque la cuento desde un momento ya pasado.Por supuesto que hay mucho mas. Es dura, para mi lo fue, teniendo en cuenta que yo no soy una yogui, y que me vine a India con una idea sobre los ashram y el yoga, que ahora me ha cambiado, ya sabes, los prejuicios.

Aún así, depende de tu interés de lo que estes buscando, la experiencia puede ser satisfactoria, lo que si esta claro es que siempre se aprende, y aquí en India por de una manera mas rápida heavy.

En el ashram conocí un italiano que se estaba tratando con el ayurveda,panchakarma, él estaba encatado, limpieza total durante unos 20 dias o así. Ademas me dijo que era uno de los sitios mas baratos. Y no te puedo decir mucho mas sobre esto.

Los alrededores son alucinantes, por la noche, escuchas a los elefantes y a los tigres. Nos hicimos un par de excursiones y me hubiera gustado seguir investigando. Tienes un lago justo al lado del ashram. Y octubre noviembre es la mejor epoca para ir. A una hora en autobus local tienes la capital de kerala Trivandrum, que no es muy bonita pero te haces una idea de india. Tienes la playa turistica de Varkala a 1 hora en tren desde trivandrum, y también kovalam.

Perfectamente puedes viajar solo, por lo menos a ti no te mirarán con demasiado deseo,auqnque si con curiosidad.

India es indescriptible, mejor que lo experimentes por ti, te animo a qaue lo hagas, además el sur es muy diferente al resto.

De momento no se me ocurre mucho mas, no dudes en preguntar cualquier cosa. Consejos te podria dar mas pero prefiero que me preguntes mas concretamente.

Saludos Agata y Aitor

Anónimo dijo...

Hola pareja!
Soy Manu, conocí a Aitor en Bhagsu justo el día que Agata salía del vipassana. Llevo unos meses de vuelta en Espein y ya estoy deseando volver.

Como tengo idea de ir al sur, ya os sondearé por si hay algo recomendable fuera del turisteo típico... ya sabéis.

Por cierto, ¿qué tal fue con los suizos y los burros?

Me alegro de haberos conocido, cuidaos mucho!

Manu

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