Kochi

Extraño en un sitio nuevo. Comienzo a escribir a oscuras. Con el silencio dentro y los sonidos de fuera...



Motores, claxon, pájaro agudo, pájaro urraca, pájaro de ensueño, voces femeninas, rencleantes vehículos, niños jugando, raquetas que electrocutan a los mosquitos, timbres, música, la llamada a la oración, mosquitos que atacan y te apuran la sangre, ventilador... mucho calor, una manguera regando, el agua cayendo en las hojas... la vida en una calle.
Dan ganas de bajar y jugar con ellos, no paran de reír y tienen ya el estómago endurecido de espasmosa carcajada. No veo. Se ha ido la luz. La cortan durante media hora para ahorrar energía. Al menos aquí sólo es media hora...

Esta época húmeda pasada no ha sido muy buena, nos dicen esperando embarcar en el ferry público que te lleva a la isla de Vypeen y su playa con seguratas que velan para que los mirones no se ceben con las extranjeras en bikini

Carteles rojos, banderas comunistas, autobuses y coches rojos, la foto del Ché, las calles son de república bananera, las casas grandes y coloniales, algunas inusualmente exhuberantes. Iconos cristianos, iglesias y fieles forofos. Barrio judío, holandés y musulmán.


Niños que pasan en bicicleta, hombres maduros jugando al fútbol y haciendo yoga por la mañana. Los cacharros de la cocina de alguien ahora están en el suelo. Perros, tos grave, un gato que maulla en celo.



Los domingos por el paseo marítimo adornado con redes chinas de pesca. Siluetas que se recortan durante el ocaso. Pescadores que venden en la calle. El teatro público y gratuito en la plaza con una performance de Kathakali... el olor a una noche de verano. Cervezas clandestinas, ocultas en tazas de té.





- How do you feel? Me pregunta la simpática y entregada muchacha de la casa...
¿que cómo me siento? Como en mi casa, - like in my home, - contesto yo.

Kochi es una ciudad que te acoge, es rápida pero no muy ruidosa, está poblada pero no abarrotada. Me sorprende algo de ella y aún no sé qué es. Cercana, su gente, más limpia, más civilizada, con un toque de atlántico y sin desprenderse de las contradicciones indias. O sinó ¿cómo se explica que este estado comunista sea de mayoría católica?